
Personal del área de Perforación de Pozos de la J+ continúa este miércoles con los trabajos de reparación del pozo 242, que es uno de los tres que abastece de agua el tanque de almacenamiento de Riberas del Bravo y cuya salida de funcionamiento generó falta del líquido en las etapas VII a IX de ese fraccionamiento.
“Estamos en la rehabilitación del Pozo 242. Vamos a colocar parches porque con el video se detectaron perforaciones a 93.4 metros de profundidad y otras que están un poco más arriba; entonces, se tienen que colocar por lo menos tres parches. Cada proceso de colocación de parche involucra 4 o 5 horas, más o menos”, explicó el ingeniero Francisco Javier Gómez Domínguez, coordinador del área de Perforación de Pozos.
Las perforaciones en el ademe (estructura metálica que se instala para evitar la entrada de arena y tierra al pozo) están a 78.32, 83.01, 92.03 y 93.40 metros de profundidad, lugares donde se deberán colocar parches de acero con un espesor de un octavo de pulgada. La misma agresividad del agua fue la que generó estas perforaciones en el pozo que fue construido en 2014 y que suministra 40 litros de agua por segundo.

Debido a estas perforaciones, entró gran cantidad de arena, arcilla y gravilla. En total se extrajeron 170 metros cúbicos de azolve, lo que afectó el funcionamiento del pozo.
Cuando se terminen de colocar, se corre de nuevo video para ver si quedaron bien los parches. Si no hay problemas, entonces el área de Extracción y Distribución de la Junta de Agua y Saneamiento de Juárez procede a hacer nuevamente el montaje del pozo para que vuelva a operar de manera regular.